23 julio 2007

Resultados electorales de Turquía: Arrasa el hombre que está cambiando Turquía

Hoy Turquía es portada en todos los periódicos, así que aquí les dejo como mi contribución después de un día exhaustivo:
---------- Los turcos conceden una victoria abrumadora al partido islamista (moderado) (El Periódico) ----------
ANDRÉS MOURENZA ESTAMBUL

No sirvieron ni las proclamas del Ejército, ni la crisis en la elección presidencial, ni los agoreros llamamientos de la oposición sobre la presunta "islamización" que pretende el Gobierno. Turquía lo dijo bien claro ayer: apuesta por la continuidad del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), la formación islamista moderada del actual primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, al que concedió cinco años más de mayoría absoluta. "La gente ha decidido que continuemos y no nos paremos. Seguiremos con nuestras reformas democratizadoras y conduciremos a Turquía a la Unión Europea", proclamó un exultante Erdogan ante miles de seguidores en Ankara. MENSAJE DE CONSENSO En un mensaje de consenso, Erdogan garantizó que gobernará "para toda la nación": "Da igual quién nos haya votado y quién no, nosotros los respetaremos, en eso radica la esencia de la democracia". "Ahora nuestra responsabilidad es mayor porque es la primera vez que el pueblo turco renueva la confianza a un gobierno desde Adnan Menderes (primer ministro en la década de los años 50 y con el que se identifica Erdogan). Con el 99% de los votos escrutados, el PJD consiguió el 46,65% de los sufragios, 12,5 puntos porcentuales más que en las elecciones del 2002. El principal partido de la oposición, el laico, socialdemócrata y nacionalista Partido Republicano del Pueblo (PRP), fracasó en su intento de convertirse en una alternativa de gobierno y solo alcanzó el 21% de los votos, un ligero aumento de un punto y medio respecto al 2002. A la oposición ni siquiera le servirá pactar con los ultraderechistas del Partido de Acción Nacionalista (PAN), quienes fueron los verdaderos beneficiados por la creciente ola de nacionalismo y consiguieron entrar en el Parlamento con el 14,29%. El PJD perderá algunos escaños en la nueva Asamblea debido a la irrupción de los ultranacionalistas y los diputados kurdos independientes. Pero, aun así, el partido de Erdogan dominará el Parlamento con mayoría absoluta gracias a sus 342 diputados (de 550). El principal partido de oposición volverá a ser el PRP, con 112 escaños, seguido por el PAN, con 69 diputados. Habrá también 27 diputados independientes, de los cuales dos docenas formarán un grupo parlamentario kurdo. Los kurdos se han apuntado un importante tanto gracias a su estrategia de presentarse como independientes en vez de bajo las siglas del Partido de la Sociedad Democrática (DTP). Ello les ha permitido esquivar la barrera del 10% de los votos necesaria para entrar en el Parlamento y por primera vez podrán formar un grupo propio. "Hemos disipado todas las conjeturas que había sobre nosotros y en estas elecciones el pueblo ha apostado por el partido más democrático", afirmo Cemil Çiçek, ministro de Justicia y candidato del PJD. "Llevaremos nuestro Estado democrático, laico y social al nivel de la civilización contemporánea tal como indicó Mustafá Kemal Atatürk (el fundador de la Turquía moderna)", prometió Erdogan, para calmar a los sectores laicos. DESERCIONES La primera deserción en la oposición se produjo en el Partido Democrático, cuyo líder, Mehmet Agar, anunció su dimisión a mitad del cómputo de votos debido a los raquíticos resultados conseguidos por su formación. También pidieron la dimisión los seguidores del PRP, cansados de que su líder, Deniz Baykal, les haya llevado desde 1992 a una serie de derrotas sucesivas con su mensaje nacionalista, incongruente con un partido que se pretende socialdemócrata. La única cuestión que queda en el aire ahora es si, tal como prometió si perdía las elecciones, Baykal irá nadando hasta la isla griega de Rodas o, simplemente, se retirará de la dirección del partido. LA PRESIDENCIA La primera tarea a la que se enfrentará el nuevo Parlamento será la elección del presidente de la República, cuya designación causó la pasada primavera una crisis política que desembocó en la convocatoria de elecciones anticipadas. Sin embargo, el PJD no contará con los diputados suficientes, 367, para elegir en solitario a su candidato y deberá pactar con la oposición un candidato de consenso. En octubre se votará en referendo la posibilidad de elegir al jefe de Estado por sufragio universal. Otro de los quebraderos de cabeza del nuevo Gobierno serán los guerrilleros kurdos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán que actúan desde el norte de Irak. Erdogan prometió que este conflicto será una de las primeras cosas que abordará el nuevo Parlamento.

---------- Erdogan se compromete a respetar el laicismo oficial (El Periódico) ----------
ANDRÉS MOURENZA ESTAMBUL

Turquía, un inmenso país de 72 millones de habitantes fronterizo con Grecia, Bulgaria, Georgia, Irán, Irak y Siria, es el país de las contradicciones aparentes y las síntesis impensables. Eminentemente rural hace 20 años, el país es hoy una boyante economía emergente que se ha modernizado a paso de gigante en los últimos años. Y, por paradójico que parezca, lo ha hecho de la mano de los islamistas moderados del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), que a sí mismos se denominan "demócratas conservadores". Turquía es un país musulmán pero extremadamente celoso del laicismo oficial, que debe garantizar el Gobierno islamista. "No haremos ninguna concesión sobre los principios fundadores de la República", garantizó ayer Erdogan. El Estado se rige por unas normas laicas mucho más severas que las de cualquier otro país europeo. Los turcos viven su religión de una forma reposada, semejante a la del resto de los países del norte del Mediterráneo: las tradiciones pesan más que la religión y no hay lugar para interpretaciones fundamentalistas. CERVEZA Y 'RAKI' Por eso no es extraño que en Turquía, en especial en las grandes ciudades, los bares estén llenos de gente bebiendo la cerveza nacional, Efes Pilsen, o cantando mientras se emborrachan con raki, el licor anisado del país. "Comer cerdo sí es pecado, como dice el Corán, pero hombre, beber alcohol es- otro tipo de pecado", se defiende con una sonrisa el joven Cengiz. Según el grupo de estudios TESEV, el 60% de las mujeres turcas se cubren la cabeza, de acuerdo a los preceptos islámicos. Pero, de estas, el 80% simplemente se coloca una pañoleta floreada, (basortusu); el 18,5% usa el velo islámico (turban), y solo el 1,5% se cubre con el çarsaf o mantón negro que cubre a la mujer de la cabeza a los pies. En Turquía está prohibido asistir a la universidad o trabajar en edificios oficiales con el velo, una polémica medida decretada en los años 80 que el Gobierno islamista moderado prometió levantar, aunque su iniciativa se ha quedado en el tintero. Paradójicamente, durante la campaña electoral, el único partido que prometió eliminar la prohibición del velo fue el laico Partido Democrático. También las organizaciones de derechos humanos reclaman la abolición de esta restricción. Estambul, al contrario que otras grandes ciudades del país euroasiático, es una pequeña muestra de Turquía. Conviven en esta megalópolis de 12 millones de habitantes la pobreza extrema con la riqueza, barrios que asemejan pequeños pueblos del interior de Anatolia con modernos rascacielos. Del mismo modo, también conviven un importante sector de la élite laica, ocupada en el funcionariado y las universidades, y una pujante burguesía y empresarios musulmanes que son un granero de votos del partido vencedor de las elecciones.

---------- El moderado hombre del cambio (El Periódico) ----------
A. M. ESTAMBUL

Considerado uno de los nuestros por las clases populares y valorado como un garante de la estabilidad por los mercados, Recep Tayyip Erdogan (Rize, 1954) hubo de emigrar de niño a Estambul y creció en el humilde barrio de Kasimpasa. En su juventud alternó diversos trabajos de oficina con su dedicación semiprofesional al fútbol y su militancia en diversos partidos islamistas. Sus convicciones de musulmán practicante son profundas, pero ahora le gusta compararse con los partidos democristianos de Europa. El ascenso político de Erdogan comenzó con su elección como alcalde de Estambul de la mano del islamista Necmettin Erbakan. Durante su paso por la alcaldía supo ganarse la fama de político eficiente. Un poema que recitó --"las mezquitas son nuestros cuarteles; los minaretes, nuestras bayonetas; las cúpulas nuestros cascos, y los creyentes nuestros soldados"-- lo llevó cuatro meses a la cárcel en 1997. Con la crisis abierta en su partido, Erdogan se dio cuenta de la necesidad de un cambio radical en su formación. Junto a su aliado Abdulá Gül, creó en el año 2001 una escisión liberal demó- crata de los islamistas que se acabaría convirtiendo en su actual partido. En su hoja de servicios como primer ministro también consta haber sido el artífice del acercamiento de Turquía a Europa. Tayyip, como se le conoce habitualmente, es un político calculador y no perdona las traiciones. Después de que el líder de la corriente más conservadora del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), Bülent Arinç, le obligase a presentar a Gül como candidato a la Presidencia, con la consiguiente polémica por el velo de la que iba a ser primera dama, Erdogan eliminó a los candidatos más religiosos e incluyó a personalidades socialdemócratas en busca de la conquista del centro político. Erbakan, islamista y antiguo mentor de Erdogan, le ha asegurado que yendo por el camino que va acabará directamente en el infierno. Parece la señal definitiva del cambio de Erdogan.

3 comentarios:

Jesús Centeno dijo...

Complimenti

Anónimo dijo...

He viajado por diferentes paises y pueblos musulmanes y he llegado a la conclusión que la religión es un factor fundamental, pero a cada persona que preguntes sobre el tema te cuenta un historia diferente, aunque la mayoría se centra en medidas muy coservadores respecto como organizar la sociedad: separación de sexos, depositar la honra del grupo el la mujer..., cubrir la cabeza de las mujeres...
Pero preguntando sobre otros temas: ecologismo, distribución de la riqueza, relaciones internacionales... se hacen la picha un lío. Además desde nuestro punto de vista de blancos no diferenciamos entre islamismo, integrismo, sharia, yihad, hiyap... además que la información que recivimos deja mucho que desear.

¿Cual es la opinión del akp sobre estos temas? ¿Que sería lo que la sociedad turca desea en general, sobre la religión? Por ejemplo los paises árabes lo llevan de otra manera, los subsaharianos de otra e indonesia de otra muy diferente.

Un saludo.

Anónimo dijo...

La inmensa mayoria de los musulmanes son blancos.