26 abril 2006

La tensa espera de las montañas de Kandil

El macizo montañoso de Kandil, en el norte de Irak, hace de frontera natural entre Irak y Turquía, muy próximo también al borde de Irán. Desde hace décadas es el refugio de los miembros del grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), de donde lanza ataques contra el ejército turco.

Contra todas las expectativas –que parecían indicar una mejora respecto a la cuestión kurda con la apertura de varios canales televisivos y radiofónicos en esa lengua, algunos posicionamientos a favor de la normalización del problema y la mejora en las relaciones entre turcos y kurdos iraquíes- en el último mes las cosas se han vuelto a torcer. Varias semanas de sucesivos atentados terroristas han terminado con los tímidos avances realizados y han devuelto la situación a punto muerto. Y no sólo.

En los últimos días las Fuerzas Armadas han movilizado a 250.000 efectivos, enviándolos al sureste de Turquía y de éstos, 40.000 han sido dispuestos en la frontera con el norte de Irak.

Según afirma un oficial militar retirado, citado por el periódico Hürriyet, “las fuerzas armadas turcas no pueden proteger la frontera con Irak e Irán pues es muy porosa”, de ahí que hayan desplegado tan inmenso contingente, un 33 por ciento del total de las fuerzas del ejército.

Pero no sólo ha habido movimiento por parte de los turcos; el PKK, según la información del diario The New Anatolian, se está preparando para repeler una posible ofensiva turca. A su vez, miembros del Partido de la Vida Independiente del Kurdistán (PJAK), un grupo armado iraní vinculado al PKK, se han sumado a los militantes kurdos en Haci Humra, en el interior de las montañas de Kandil.

El ejército iraní también se ha movilizado bombardeando las posiciones del grupo kurdo-iraní y desplegando en su frontera suroeste unos cuantos miles de soldados.

Según el comandante del ejército de Tierra, Yasar Büyükanit, se trata de una operación típica de la primavera, cuando tras los fríos del invierno las tropas del PKK tienden a movilizarse. Aún así las dimensiones de la operación asustan.

Jalal Talaban, líder kurdo-iraquí de la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK) y Presidente del Gobierno iraquí no ha criticado la operación militar pues de momento se haya sólo en suelo turco, aunque condenó cualquier atentado a la soberanía territorial iraquí.

Por el momento sólo queda la espera ante los inescrutables caminos de la política turca. Esperan tensos los militares –muchos de ellos jóvenes desplegados durante su servicio militar-, esperan los kurdos –jóvenes y niños que ayudan al PKK a cambio de dinero en una zona castigada hasta el extremo por la pobreza-, espera Europa –y una adhesión que podría, en cualquier momento saltar por los aires- y, sobre todo, esperan las gentes del sureste de Turquía –kurdos, turcos y árabes- a que una nueva oleada de violencia no les devuelva a los oscuros años de guerra no declarada. Espera, en fin, el sentido común.

Dos pequeños datos para la esperanza:

  1. El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, invitó en una conferencia de prensa a que el PKK dejase las armas y se sentase a negociar. Esta invitación no ha tenido, sin embargo, muy buena acogida por parte de los demás partidos, la prensa ni los militares.
  2. El PKK, en un reciente comunicado publicado en su web en el que ordenaba a sus militantes sustituir la lucha rural por la callejera, también acusaba de traidores a los miembros del Partido de la Sociedad Democrática (DTP), sucesor del histórico DEHAP, lo que debería conducir a una separación aún mayor de este partido –el DEHAP ha entrado a formar parte de la Internacional Socialista- del grupo armado. Aún así las bases y muchos de sus dirigentes no han dejado de apoyar las acciones del PKK.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho el artículo.¿Sabes como están ahora las relaciones del pkk con las partidoas del sur?

Andrés Mourenza dijo...

Pues oficialmente no apoyan al PKK aunque entre parte de la poblacion tenga su apoyo moral. El gobierno de Talabani se encuentra entre dos fuegos pues a la vez que Turquia le presiona para que ataque las posiciones de Kandil pero a la vez no puede permitirse ese numero frente a su poblacion kurda.
Por otra parte EEUU afirma luchar contra el PKK ante Turquia pero parece ser, segun se rumorea e Iran afirma, que acepto la propuesta del PKK de sentarse a negociar.
Y esto lo deben saber en Ankara que cada vez ven con mas recelo a los americanos.