18 febrero 2006

Polémica visita de Hamas a Ankara

El líder de Hamas, Jaled Mashaal, durante su visita a Turquía (Foto: The New Anatolian)

La enésima polémica del Gobierno de Recep Tayyıp Erdoğan ha tenido que ver con la visita de dos dias realizada por una delegación palestina a Ankara, en un momento en que el gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) parece aquejado del tradicional desgaste de fin de legislatura (las elecciones se celebran en 2007). Las crisis se suceden (moción al ministro de Finanzas, enfrentamiento con el sistema judicial, intervenciones incorrectas…) y la oposición no permite un paso sin lanzarse sobre el partido de Erdoğan. Así las cosas, el Gobierno decidió incrementar su influencia en Oriente Próximo –como ya se había señalado hace unas semanas en este mismo espacio– a expensas del cuarteto de Madrid (ONU, UE, EEUU y Rusia) recibiendo a una delegación del partido vencedor en las últimas elecciones palestinas, el Movimiento para la Resistencia Islámica (Hamas).

Sin embargo, y como muestra del desorden que reina en su patio, el AKP no ha sabido organizar la visita sin que le llovieran las críticas desde el resto de partidos y desde los países más implicados en el tema.

La visita, que comenzó el pasado jueves y pilló a todo el mundo por sorpresa, fue organizada por el asesor de Política Exterior de Erdoğan, Ahmet Davutoğlu -según aclara el diario Hürriyet- porque “para jugar un papel activo en Oriente Medio, Turquía tiene que convertirse en un poder significativo” en la región.

Aljazeera, en una información del pasado jueves titulada “Visita sorpresa de Hamas a Ankara”, afirmaba que la invitación de Erdoğan suponía el primer viaje de un líder de Hamas a un país no árabe. Sin embargo, según el diario Hürriyet, la delegación palestina, encabezada por Jaled Mashaal, “no recibió una invitación sino una serie de órdenes”, entre las que destacan: el reconocimiento de Israel, el abandono de la violencia, la no cooperación con otros grupos armados de la región y la consolidación de la democracia.

Los dos días por los que se prolongó la visita estuvieron cuajados de polémica, comenzando por las diferencias entre el Ministerio de Exteriores y el Gobierno, que no se pusieron de acuerdo en quién debería haber realizado la invitación. Finalmente, algo del todo anormal, el ministro de Exteriores, Abdullah Gül, recibió a los miembros de Hamas en la sede central del AKP. “La idea inicial -escribe Zeynep Gürcanlı, citando fuentes diplomáticas- era contactar con Hamas tras la formación del nuevo gobierno [que ha tenido lugar hoy sábado]”. Aún así, la petición de Hamas de adelantar la fecha hizo cambiar de parecer al Gobierno de Erdoğan puesto que así se dio “un mensaje por adelantado que podría ser crucial para influir en la escructura del nuevo gobierno de Hamas”, concluye la periodista de The New Anatolian.

Los líderes de la oposición, por el contrario, han criticado el encuentro, comenzando por el del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Deniz Baykal, que subrayó la “inconsistencia” de la política de AKP en una visita “mal planeada” y que “creará problemas en las relaciones con los EEUU y Europa”. El líder del Partido de la Madre Patria (ANAP), el ex-AKP Erkan Mumcu, avisó al Gobierno de que esta iniciativa pone en duda “la credibilidad de Turquía” y que “si alguien pide a Turquía mediar entre palestinos e israelíes, estas iniciativas deberían estar mejor planeadas”, publica hoy The New Anatolian.

También Israel ha hecho público su descontento por la visita de Hamas, comparándolo con el PKK, algo que no ha sentado nada bien en el Gobierno turco, informa Zaman en su edición on-line.Incluso se puede vaticinar el malestar de EEUU, a pesar de que no ha hecho ninguna declaración pública, por el comportamiento cada vez más díscolo (y más independiente) de ese antiguo aliado que era Turquía.

Hoy, el parlamento Palestino ha elegido a Ismail Haniya para dirigir el gobierno de la Autoridad Nacional Palestina. Se trata de uno de los representantes del ala moderada del partido integrista que se espera mejore las dañadas relaciones con el presidente palestino Mahmud Abbas, de Al Fatah, quien ha exigido a Hamas que "deje las negociaciones con Israel en sus manos", según cita El País. Este nombramiento –que, de todas formas, ya se esperaba- podría ser un triunfo de la agitada diplomacia del Gobierno turco o un simple triunfo del sentido común. El tiempo lo dirá.

No hay comentarios: